Los misterios de la Plaza Mayor de Madrid

Situada en el punto de mira tras el «paradójico» discurso de la alcaldesa de la villa, la Plaza Mayor de Madrid se erige como uno de los emplazamientos destacados para todos aquellos que visitan la capital y, como no, para lo que habitamos en ella.

Quién de vosotros no ha paseado por la plaza empedrada; quién no ha recorrido los soportales de la misma y se ha detenido ante los escaparates de los comercios que recorren su contorno; quién de vosotros no ha recuperado fuerzas con un excelente bocadillo de calamares. Estoy segura de que la mayoría de las personas que estáis ojeando estas líneas habéis respondido afirmativamente a alguna de estas preguntas pero, de lo que también estoy segura es de que muchos de vosotros no conoceréis las múltiples funciones, hechos y acontecimientos que giran en torno a su historia.

Con más de seis siglos de vida lo que hoy se conoce como Plaza Mayor nació de la confluencia de dos caminos entre la Calle Toledo y la Calle Atocha. Por aquél entonces era por todos conocida como Plaza de los Arrabales (pinchar en el enlace si queréis ver su origen en un mapa) por estar situada en las afueras de la muralla medieval. En ella se disponían las ventas de todo tipo de alimentos, instrumentos y enseres necesarios en aquella época,es decir, se constituía como un espacio donde se regulaba el comercio y el mercado de la zona.

A lo largo del siglo XVI la villa fue ampliando y consolidando su estructura a manos de las ordenanzas de los Austrias. Todo su tramo urbano se amplió y la plaza quedó integrada en el nuevo trazado de la muralla. Poco a poco su estructura se consolidó, primero con los trazos del arquitecto Juan de Herrera en esta centuria y, finalmente para acabar bajo los diseños de Juan Gómez de Mora a inicios del siglo XVII. Es en este centenario cuando emerge la estructura rectangular que hoy conocemos.

Pero sólo diez años más tarde, la plaza sufrió su primer incendio debido a los hornos que se encontraban en el edificio más antiguo de la plaza, el de la Casa de la Panadería (que se constituyó como la tahona más importante de todo Madrid). Con el fin de solventar futuros problemas, se decidió sustituir el material de las cubiertas que eran de madera, por plomo. Sin embargo al cabo de cuarenta años, la Casa sufre un nuevo incendio y se reconstruye pero, como se suele decir «no hay dos sin tres», a finales del siglo XVIII es presa de las llamas un tercio de la plaza. Los conocidos arquitectos Sabattini y Villanueva entran en juego y deciden rebajar la altura de la construcción y delimitar el acceso a través de las arcadas que hoy conocemos, gracias a ello la plaza no volvió a ser presa de las llamas. Las últimas incorporaciones se realizarían ya en el siglo XIX con la ubicación de la estatua ecuestre de Felipe III y, la posterior decoración de la Casa de la Panadería en el siglo XX utilizando para ello una iconografía basada en la mitología clásica.

Pues bien, nueve son las entradas que te permiten acceder a la plaza ( pincha aquí) pero la más conocida de ellas es la de «Los Cuchilleros», cuyo nombre proviene de la profesión que se desarrollaba en la calle donde desembocaba este acceso. Pero ¿que ocurría en esta plaza?. Muy alejada de la visión actual, el enclave porticado ha estado al servicio de multitud de actividades un tanto lúdicas, como los espectáculos populares,la beatificación del Patrón de Madrid, las corridas de toros (la última celebrada en el siglo XVII), los mercados (como el que se realiza todos los domingos por la mañana de filatelia y numismática o el de Navidad que se remonta a 1860) como otras mas funestas, ya que el recinto se convirtió en el lugar idóneo para practicar ejecuciones y autos de fe. Hoy día su historia queda marcada visualmente en las basas de las farolas que alumbran la plaza, como os muestro en la imagen del post.

Las ejecuciones tenían una especie de «patrón» a seguir dependiendo del nivel social al que pertenecieras. Si eras un noble, morías degollado frente a la Casa de la Panadería; si por el contrario eras un delincuente o pertenecías a la clase baja, eras juzgado a sucumbir bajo el garrote vil frente a la Casa de la Carnicería (frente a la de la Panadería). Para el resto de los casos se optaba por la horca en el desaparecido Portal de Paños (zona occidental izquierda de la Plaza), sin embargo esta práctica quedó abolida por Fernando VII y las penas quedaban reducidas al degollamiento y al garrote vil.

Lo que más me ha sobrecogido al indagar sobre la Plaza Mayor, es el último auto de fe que se celebró allá por el año 1630 en el que perecieron 118 almas. Algunos no sobrevivieron a las torturas impartidas tras ser «interrogados» por el Tribunal de la Inquisición (curiosamente hoy día el lugar donde se erigía, emplazado en la Calle Torija, constituye el hogar de las monjas de clausura Reparadoras que paradójico, ¿verdad?)  por lo que se portaban en procesión sus nombres a la hora de llevarse a cabo el auto; otros perecieron bajo las llamas de la hoguera y los restantes fueron estrangulados por garrote vil, fijaros de nuevo en la imagen del post.

Existe un cuadro que representa este último auto y un escrito que expone literalmente todo lo que ocurrió ese día (pincha aquí). Os invito a que todo aquél que visite este post me responda a una sencilla pregunta:

¿Queréis conocer todo lo que hay detrás de este cuadro?

SI

NO

Dependiendo de vuestras respuestas os haré partícipes de lo que ocurrió ese día y entonces os hablaré de los túneles que se esconden bajo vuestros pies cuando llegáis a las inmediaciones de la Plaza.

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Sin más me despido de vosotros y os doy de nuevo las gracias por visitarme.

6 pensamientos en “Los misterios de la Plaza Mayor de Madrid

  1. Me encanta ,desconocia como se fundo ,y toda la historia que nos cuentas. Siempre me ha gustado visitarla creo que es uno de sitios con mas encanto de Madrid. Me gusta mucho como nos has enseñado con imagenes , sus entradas y todo lo que nos explicas. Ese cuadro es precioso y por supuesto ,estoy deseando que no lo expliques y nos deleites con esas historias que gracias a ti podemos conocer , sus pasadizos y sus ajusticiamientos , espero que nos lo desveles pronto

  2. Me ha encantado la foto del enlace, no imaginaba la Plaza Mayor asi. Ahora la vere de otra forma.
    Me gustaria saber mas.
    Gracias!

  3. Quiero saber más sobre ese día y por favor los túneles!!!! Un besito, seguiré leyendo siguientes post. Ahora voy con el de la calle huertas jiji. Me encanta como escribes!

  4. Cada vez me gusta más mi pueblo, está cuajado de historia, y de personas que nos hacen disfrutar cuando la cuentan. Muchas gracias.

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